Parece un ajuste de términos, pero en realidad se trata de un cambio de paradigma. Acumular “hierros”, con vida útil limitada dejó de ser negocio, frente a una oferta de licencias que son extremadamente útiles durante el tiempo que se requiere el servicio, ni más ni menos.
Los fabricantes están dedicando sus recursos a la investigación y desarrollo de alternativas de sóftwer que les abaraten sus costos, y también los de sus clientes actuales y potenciales. Es un paso adelante en el desarrollo de una industria que necesitan generar muchísimo más contenido, pero con muchos menos recursos.
Contar con herramientas virtuales en todo el flujo de trabajo de producción, o con equipos de renta, para uso puntual, se ha convertido en una práctica recurrente que ha convertido al servicio en el nuevo modelo de negocios, el que está reflotando a una industria que ya no podía cargar con el peso de los hierros.
Es el tiempo del servicio y de transar el negocio en función del tiempo útil consumido. Esto cambió y todos estamos en cuenta de ello.